Un día para soñar: escapada a Formentera o Ibiza desde Dénia

Hay viajes que no necesitan maletas grandes, ni semanas de planificación, ni vacaciones interminables. Hay viajes que caben en un solo día… y que, sin embargo, se quedan grabados en la memoria como si hubieras vivido un verano entero.

Uno de esos viajes comienza en el puerto de Dénia, con el sol subiendo sobre el Montgó y el olor a café recién hecho mezclándose con la brisa marina. Son las primeras horas de la mañana y la ciudad despierta tranquila, pero el puerto late con otro ritmo: el de los que están a punto de embarcarse en el Ferry de Denia Formentera o Ibiza.

El placer de partir sobre el mar

Subir a un fast ferry de última generación es, en sí mismo, parte de la aventura. No es solo un medio de transporte: es un salón con vistas al Mediterráneo, un lugar donde el tiempo se dilata y la rutina queda atrás.

En cuanto el barco se aleja del muelle, la costa de Dénia se va difuminando y el horizonte se abre. El mar se pinta de un azul profundo que parece inventado y la sensación es clara: el viaje ha comenzado.

Estos ferries no son como los de antes. Ahora hablamos de embarcaciones ecoeficientes, rápidas y silenciosas, capaces de unir Dénia con Formentera en poco más de dos horas gracias a su propulsión de alta velocidad. Incorporan tecnología de bajo impacto ambiental, en muchos casos impulsados por gas natural licuado, que reduce drásticamente las emisiones contaminantes.

A bordo, el confort es protagonista: asientos amplios, climatización, cafetería, zonas exteriores para sentir el viento marino y un diseño que reduce la vibración y el balanceo. El viaje es tan suave que, sin darte cuenta, estás a mitad de camino con un café en la mano y una sonrisa en la cara.

Formentera: el Mediterráneo más puro

En poco más de dos horas, la silueta de Formentera aparece en el horizonte. Es un territorio pequeño, pero con un magnetismo inmenso. Desembarcar en el puerto de La Savina es entrar en un mundo pausado, donde el tiempo parece tener otra cadencia.

Aquí, la bicicleta es reina. Muchos alquilan una en cuanto bajan del barco y pedalean rumbo a Ses Illetes, una lengua de arena blanca bañada por aguas turquesa que ha sido nombrada en más de una ocasión como la playa más bonita del mundo.

Otros prefieren recorrer la costa hasta Cala Saona, más recogida, donde las aguas transparentes invitan a nadar sin prisas. La gastronomía también tiene su momento: un arroz marinero frente al mar o un pescado recién salido de la lonja saben diferentes cuando se comen aquí.

El tiempo pasa rápido en Formentera. Y antes de darse cuenta, es hora de volver al puerto para el viaje de regreso. Pero hay una última postal que la isla regala: la vista del sol cayendo sobre el mar mientras el ferry pone rumbo norte.

Ibiza: energía y tradición

La alternativa es el Ferry Denia Ibiza, y aunque su fama internacional habla de fiesta y noches interminables, en un solo día también se puede descubrir su otra cara: la de la historia, la artesanía y el mar en calma.

Apenas llegas al puerto, Dalt Vila se alza imponente, con sus murallas declaradas Patrimonio de la Humanidad. Perderse por sus callejuelas empedradas, descubrir talleres de artistas y asomarse a miradores que dominan todo el puerto es un viaje en sí mismo.

Las calas cercanas ofrecen otro plan: Cala Comte, Talamanca, Ses Figueretes… lugares donde el Mediterráneo se muestra en todo su esplendor. Y, cómo no, siempre hay un rincón para saborear un café o un cóctel con vistas al mar antes de volver al barco.

Viajar sin complicaciones

La magia de estas escapadas radica en su simplicidad: madrugar un poco, subir al ferry, dejarse llevar y volver por la noche con la piel salada y el corazón lleno. Sin facturar maletas, sin aeropuertos, sin controles interminables. Solo mar, sol y la certeza de que en unas horas vivirás algo único.

Y aquí es donde Clickferry se convierte en el aliado perfecto: reúne en un solo lugar todas las opciones de horarios, compañías y precios para viajar desde Dénia a Ibiza o Formentera, tanto en verano como en otras épocas del año. Así, puedes encontrar billetes ida y vuelta en el mismo día desde 59 € en algunas fechas de temporada. Todo con confirmación inmediata y billete digital con QR para embarcar sin más complicaciones.

Una experiencia que engancha

Quien la prueba, repite. Porque hay algo profundamente satisfactorio en salir de casa al amanecer, recorrer el mar abierto y regresar al anochecer con el cuerpo cansado pero feliz. Es un recordatorio de que a veces la aventura está más cerca de lo que creemos y que no hace falta volar a miles de kilómetros para vivir algo memorable.

El Mediterráneo nos guarda tesoros muy cerca, y Dénia es una de sus llaves maestras. Desde aquí, en solo unas horas, puedes asomarte a la pureza de Formentera o a la energía única de Ibiza. Y hacerlo en un fast ferry ecológico, rápido y cómodo, convierte el trayecto en parte esencial del viaje.

Este verano, si buscas un plan diferente que combine mar, naturaleza, cultura y ese espíritu mediterráneo que nunca pasa de moda, sube a bordo. Las Baleares te esperan. Y el viaje empieza en Dénia.